«Mallorca tendrá para siempre un lugar en nuestros corazones y no podemos esperar
a volver para celebrar nuestros aniversarios a lo largo de los años.»«Mallorca will forever have a place in our hearts and we can’t wait
Harriet Clarke
to return to celebrate our anniversaries over the years.»
A Max y a Harriet les encanta viajar, conocer nuevos lugares, culturas, y desde que se prometieron sabían que quería hacer una boda destino para reunir a todos sus seres queridos y disfrutar de unos días de ensueño. Se conocieron hace 5 años en las bonitas playas de Ibiza y no había duda que se darían el ‘sí quiero’ rodeados del Mediterráneo. Se enamoraron de Deià en uno de sus primeros viajes juntos, y aunque barajaron varias opciones, la pareja tenía una visión de boda de un lujo discreto, y no dudamos en que no había mejor enclave que Belmond La Residencia.
Max and Harriet love to travel, to know new places, cultures, and since they got engaged they knew they wanted to have a destination wedding to gather all their loved ones and enjoy a few dreamy days. They met 5 years ago on the beautiful beaches of Ibiza and there was no doubt that they would say ‘I do’ surrounded by the Mediterranean. They fell in love with Deià on one of their first trips together, and although they shuffled several options, the couple had a vision of a wedding of discreet luxury, and we have no doubt that there was no better location than Belmond La Residencia.
Con un impresionante vestido de Galia Lahav, unos inconfundibles Manolo Blannick y las joyas que le regaló su ya marido como regalo de boda, Harriet estaba radiante y feliz. La decoración sencilla de flores blancas con verdes no le restaron protagonismo a las casitas de piedra y las montañas que rodean El Olivo.
Wearing a stunning Galia Lahav gown, unmistakable Manolo Blannick and jewelry given to her by her now-husband as a wedding gift, Harriet was radiant and happy. The simple decoration of white flowers with greenery did not detract from the stone houses and mountains surrounding El Olivo.
La novia nos cuenta que las partes que más disfrutó del proceso fueron la visita de fincas y espacios antes de decantarse por el Hotel, y todas las reuniones relacionadas con la decoración, la elección de las flores, las velas, el menaje… Se emocionó cuando veía que todo lo que había visto en PDFs, en emails se estaba materializando, su boda soñada estaba cobrando vida y siendo más bonita e increíble de lo que jamás se habría podido imaginar.
The bride tells us that the parts of the process she enjoyed the most were the visits to farms and spaces before choosing the Hotel, and all the meetings related to the decoration, the choice of flowers, candles, tableware…. She was thrilled when she saw that everything she had seen in PDFs, in emails was materializing, her dream wedding was coming to life and being more beautiful and incredible than she could have ever imagined.
En ningún momento dudaron que era imprescindible contar con un equipo de wedding planners, y más teniendo en cuenta que ellos no viven en la isla y que querían una celebración de tres días: una cena informal para dar la bienvenida a sus invitados, y un desayuno reparador al día siguiente, aparte del gran día.c
There was no doubt in their minds that a team of wedding planners was a must, especially since they don’t live on the island and wanted a three-day celebration: an informal dinner to welcome their guests, and a restorative breakfast the next day, in addition to the big day. It was clear to them that they wanted a company that was local, to help them deal with vendors, offer recommendations and guide them towards their vision.
La cena de bienvenida fue clave para que todos los invitados se conocieran y disfrutaran de un evento íntimo rodeados de montañas en una de nuestras villas favoritas en el Puerto de Sóller. El toque de color fue el protagonista en una bbq informal dando comienzo a un fin de semana lleno de felicidad y amor.
The welcome dinner was key for all the guests to get to know each other and enjoy an intimate event surounded by mountains in one of our favorite villas in Puerto de Sóller. The touch of color was the protagonist in an informal bbq kicking off a weekend full of happiness and love.
Photos by @mariahibbsphotography